Jueves 24 de Noviembre.

Los días previos a este teniamos tantas ganas de quedarnos, como de volver a casa, sin embargo con la vuelta tan cerca lo único en lo que pensabamos era el llegar cuanto antes, sin embargo teniamos responsabilidades todavia, el dejar todo como lo encontramos, tirar la basura y disponernos para llegar al aeropuerto,

Salimos con bastante tienpo, en caso de que el tráfico nos jugara una mala pasada o hubiera una cola más larga de lo normal, pero tuvimos mucha suerte y conseguimos facturar y llegar a nuestra puerta de embarque en tiempo record, y nos sobraron dos horas que aprovechamos para comprar algo de comido en una cafetería y hablar con nuestros seres queridos.

La compañía con la que volabamos era Finnair y la verdad es que la recomendamos un montón debido al gran trato que tienen con sus clientes, el viaje duró unas 4 horas y la verdad que había unas cuantas turbulencias, pero no nos dimos casi cuenta pues nos pasamos casi todo el viaje dormidos.

Llegamos con unas ganas tremendas de relajarnos en nuestros hogares, y en cuanto vimos a la gente que había venido a recibirnos corrimos directos a sus brazos.

Con esto acabamos la última entrada de este blog, os agradecemos que nos hayais acompañado en esta experiencia y que os haya gustado tanto como a nosotros.

Miércoles 23 de Noviembre

Este día fue muy duro, se nos hizo cortisimo. Le habiamos comprado un regalo a nuestra tutora en el hospital por todo el apoyo que nos ha dado y también unos bombones para nuetra unidad. A la una tuvimos una reunión con nuestras tutoras y firmamos todos los documentos necesarios para confirmar haber completado nuestros estudios aquí satisfactoriamente. Tras eso llegaba el peor momento, el de nuestra despedida con todo el personal del hospital.

Con una gran tristeza nos dispusimos a volver a nuestra residencia para prepararnos para esa tarde, puesto que no ibamos a dejar el último día en Helsinki sin hacer nada, por lo que decidimos quedar con gente que habiamos conocido allí para ir al cine juntos, a modo de despedida.

Nos lo pasamos genial, pero cada momento que pasaba se acercaba más a el momento de no volvernos a ver, y después de una emotiva despedida nos dirigimos a nuestras respectivas habitaciones para acabar de ordenar nuestras maletas y descansar para coger el día siguiente el avión hacia Madrid.

Lunes 21 y Martes 22 de Noviembre.

Podemos resumir estos dos últimos días en compras, compras, compras y....limpieza. Estuvimos realizando los últimos detalles de nuestra estancia allí, los regalos para nuestros seres queridos y además de eso un detallito para la gente de nuestra unidad, además también teniamos que limpiar la ropa, que aunque era poca por que lo realizamos hace poco pero no queríamos ir con ropa sucia de vuelta. Además teniamos que empezar a ordenar nuestras cosas para que el último día no tuvieramos que ir corriendo.

Parece mentira que ya hayamos pasado un mes aquí, y que haya pasado tan rápido, nos da mucha pena por toda la gente que hemos conocido y que dejamos atrás,pero tenemos muchas ganas de ver a nuestra familia y amigos.

Fin de Semana,V-S-D 18, 19 y 20 de Noviembre

Tras salir del hospital fuimos a comprar unas cosillas y después fuimos a tomarnos un café en la cafetería a la que fuimos con nuestra amiga Deborah, es curioso lo inexpertos que eramos la primera vez que fuimos a esta cafetería en la que casi no ssabiamos ni como pedir el café a lo que hemos llegado ahora, que nos movemos por la ciudad casi como si hubieramos vivido aqui toda la vida.

Mientras estabamos allí recibimos un mensaje de un compañero de la residencia que nos invitaba a celebrar su cumpleaños por lo que durante la vuelta a casa compramos algo de comida y nos dirigimos hacia allí. Nos lo pasamos genial y al dia siguiente estabamos tan cansados de toda la semana y del día anterior que nos lo tomamos de relax, además necesitabamos un tiempo para realizar la colada.

Madrugamos el domingo con las pilas recargadas y listos para volver a Suomenlinna ya que nos quedaba una zona que visitar, la fortaleza.
La nieve ya se habia derretido y no llovia, por lo que decidimos pasar el viaje en ferry en la cubierta observando el paisaje, fue muy entretenido, ya que durante todo el viaje nos acompañaron las gaviotas muy de cerca, y era una maravilla el verlas volar.

Una vez pasada la muralla el paisaje cambia un montón, antes podiamos observar el pueblo más o menos concurrido, pero aqui a donde alcanzaba la vista se veian arboles y prado.
Recorrimos la muralla por la parte interior y vimos unas cabañas incrustadas bajo las colinas, y era una vista que parecia sacada de un poblado hobbit. (;D).

Cuando acabamos de ver la isla volvimos al centro de la ciudad y para hacer tiempo hasta las cuatro de la tarde (o más bien de la "noche" por lo oscuro que estaba), buscabamos algún sitio para comer, y nos decidimos por una pizzería de la zona, que aunque era un poco carilla la comida estaba riquísima, y podias sentir el olor de la masa fresca recién hecha en el ambiente.

La razón por la que queríamos esperar hasta las 4 era porque a esa hora comenzaba una cabalgata de navidad, que comenzaba delante de la Catedral Blanca en Alexanterinkatu y continuaba por la Esplanada, e iban encendiendo las luces a medida que pasaban,
Habia de todo, caballos, gente vestida con ropa tradicional, una carroza de Rudolph, Papá Noel montado en un trineo antiguo... Nos lo pasamos genial y volvimos a casa para prepararnos para nuestros últimos días en Helsinki.

Jueves 17 de Noviembre. Visita al cementerio de Hietaniemi.

Nos pareció bastante curioso e interesante ir a este cementerio ya que teníamos la curiosidad de ver como eran aquí, aunque nos lo imaginábamos igual que todos los cementerios del mundo.

Era muy grande, y dentro de él había bastantes esculturas que no sabíamos porque estaban ahí, caminando llegamos a un sitio donde había una especie de lago y como ya estaba anocheciendo se veía muy bonito, ya que también se podía observar una parte de la ciudad desde esa zona. 

Decidimos irnos antes de que se hiciera más de noche (ya que no queríamos cagarnos de miedo, lo siento por la expresión).

Nos resultó difícil encontrar la salida, nos volvimos locos buscando alguna parada de tranvía, bus o similares para poder volver a la residencia. Al final fuimos andando hasta el centro de la ciudad y de allí cogimos el bus que nos llevaba a nuestra residencia. 

El día se nos hizo bastante corto y también teníamos ganas de que acabará porque al día siguiente era ¡VIERNES!.

Miércoles 16 de Noviembre. LOCURAAAAAA CON LOS TRINEOS Y TABLA DE SNOW.

Este día a la salida del hospital pensamos en que íbamos a ir directamente a la residencia a descansar, pero tuvimos la gran oportunidad de que nos saliera el plan de ir a montar en trineo, ya que sabíamos que iban a subir las temperaturas aquí y la nieve se iba a deshacer.

María estaba demasiado emocionada, que hasta se atrevió a usar la tabla de snow, la que parecía demasiado peligrosa, pero no se le dio tan mal.

Fuimos a unas colinas que había detrás de la residencia, la primera era muy pequeña y no era muy empinada, pero era divertido porque tenía muchas curvas. 

La segunda fue mejor, era más grande y tenías que hacer más maniobra para no chocarte con los árboles que había alrededor o caerte por otro sitio más elevado, aunque en más de una ocasión ocurrió que nos hubiéramos chocado, pero eso es lo divertido ¿no?. Eso sí, siempre y cuando tengas cuidado. 

Nos lo pasamos realmente bien, ya que era nuestra primera vez que lo probamos, aunque nos hubiera gustado ir más veces. 

Penúltima semana.

La verdad que el tiempo se nos ha pasado volando, no nos creemos que ya solo nos quede una semana, bueno, en verdad 3 días.

Esta semana hemos hecho las últimas visitas por aquí, no han sido muchas ya que cuando más aprovechamos fue al principio del viaje. Estos días han sido más de "relax", hemos ido viendo rincones más escondidos de Helsinki, lo que significa que hemos caminado más que en todo el mes entero, tuvimos la suerte de que haciendo esto, encontramos varios sitios con unas grandes azoteas desde las cuales se veía todo Helsinki iluminado y por la noche, era bastante bonito. Lo más curioso que una de ellas estaba en un centro comercial, en el que plantas más abajo había un museo de videojuegos, en el que se podían observar los distintos tipos de juegos, consolas y PCs  que han existido a lo largo de los años. 

De nuevo, también tuvimos que hacer la compra para poder alimentarnos (jajajaja), como ya no nos queda nada, no compramos demasiadas cosas, solo las necesarias para los últimos días.

Y cuando tuvimos la oportunidad de tener un día más "tranquilo" en el que nos diera tiempo a hacer las obligaciones del estar "independizados", lo hicimos pero con demasiado cansancio encima. 

Estamos notando que cada vez que se va acercando el final, estamos más cansados y con ganas de volver, pero también con esa sensación de que esta experiencia es demasiado bonita como para que se acabe tan pronto, lo estamos pasando tan bien que realmente lo echaremos de menos y sobre todo la suerte que hemos tenido de conocer a toda la gente de aquí.